Les hemos puesto cara y nombre. Son archiconocidas. No nos imaginaríamos reunirlas a todas en la misma habitación para que hablaran líbremente sin la presión de sus respectivos medios sobre sus gustos de moda. Seguramente nos sorprenderíamos. Unas más odiadas (por culpa del cine), otras más queridas, unas con poderosa presencia, alguna por que no decirlo... horrorosamente vestida.
Pero al fin y al cabo son las que dicen el cómo, cuándo y dónde de lo que se cuece en moda. Pueden encumbrar y mandar a los mismísimos infiernos. Si ellos son los que diseñan, ellas escriben sobre ellos.
Las incorruptibles (¿o no tanto?) de la moda.
Acerquémonos a los estilos de este selecto club de cinco (por orden alfabético para no herir sensibilidades):
Suzy Menkes: "la primera dama"
65 años. Inglesa. Viuda.
Su aspecto es el de una señora normal con un rulo en la cabeza. En este selecto club vamos a ver cuan importante es el formarse una imagen diferenciadora que dé credibilidad, y que perdure en el tiempo. Para bien o para mal, como decía Moschino "si no puedes ser elegante, sé al menos extravagante".
En el caso de Suzy Menkes, editora de moda del Herald Tribune es su famoso tupé.
Atesora condecoraciones, la medalla de oficial de la orden del imperio británico y el título de caballero de la legión de honor de Francia. Es posiblemente, con el permiso de Anne Wintour, la más influyente del grupo desde su columna.
La editora es un prueba palpable que hablar, en este caso escribir sobre moda y estilo no significa tenerlo.
Anna Piaggi : "la experiencia"
Sobrepasa los setenta. Vive en Nueva York. Viuda del fotógrafo Alfa Castaldi.
65 años. Inglesa. Viuda.
Su aspecto es el de una señora normal con un rulo en la cabeza. En este selecto club vamos a ver cuan importante es el formarse una imagen diferenciadora que dé credibilidad, y que perdure en el tiempo. Para bien o para mal, como decía Moschino "si no puedes ser elegante, sé al menos extravagante".
En el caso de Suzy Menkes, editora de moda del Herald Tribune es su famoso tupé.
Atesora condecoraciones, la medalla de oficial de la orden del imperio británico y el título de caballero de la legión de honor de Francia. Es posiblemente, con el permiso de Anne Wintour, la más influyente del grupo desde su columna.
La editora es un prueba palpable que hablar, en este caso escribir sobre moda y estilo no significa tenerlo.
Anna Piaggi : "la experiencia"
Sobrepasa los setenta. Vive en Nueva York. Viuda del fotógrafo Alfa Castaldi.
Adorada por Blahnik, Lagarfeld (que retrató 12 años de la periodista en el libro "Lagerfeld´s Sketchbook"), Dolce e Gabbanna, Jefferson Hack...
Es del club de las cinco, la que posee una imagen más esperpéntica con su mecha azul ondulada sobre el rostro, sus excéntricos sombreritos y la acumulación de ropa a la que se somete.
Un look acorde por ser la periodista de los excesos:
- Más de 7.000 crónicas de moda para Vogue Italia, Vanity Fair...
- Más de 2.865 vestidos y más de 265 zapatos en su vestidor que fueron expuestos en el V&A.
A medio camino entre Paquito Clavel y la Mona Lisa, la Piaggi nos parece ella en sí una obra de arte andante. Nos encantaría sumergirnos en su inmenso armario.
51 años. Parisina de origen ruso. Cristian Restoin es su pareja desde hace más de 30 años (no se casa para no divorciarse)
Musa de Tom Ford, la estilista favorista de Mario Testino...
La editora jefe de Vogue Francia, considerada la mejor vestida del mundo, llegó a la revista para saltarse todas las normas y tuvo éxito.
Odia los relojes, nunca la verás con bolsos, en su lugar suele posar con las manos en los bolsillos. Preocupada por mantener su eterno femenino Carine es mortal y se tinta el pelo mientras dice ver envejecer a los mismos en el front row.
Es sin duda, la que más nos gusta, con esa facha de estrella del rock, también es verdad que es la más joven y se puede permitir lucir los modelitos. Su imagen es un buen ejemplo de como 5 elementos pueden funcionar para crear un look imperecedero: siempre de negro, melena ultralisa (preferiblemente a la cara), cejas espesas, bronceado indeleble y ojos fumée. Parece sencillo pero probar a imitarlo y veréis qué espanto.
Pero la vida de una gran editora aunque sea de moda no es de brillo constante, las sombras: su dosis diaria de Lemoxyl para mantener la calma y el vodka "con un copa me siento más bella y mejor". Lo dicho, puro sex, drugs and rock´n´roll.
Odia los relojes, nunca la verás con bolsos, en su lugar suele posar con las manos en los bolsillos. Preocupada por mantener su eterno femenino Carine es mortal y se tinta el pelo mientras dice ver envejecer a los mismos en el front row.
Es sin duda, la que más nos gusta, con esa facha de estrella del rock, también es verdad que es la más joven y se puede permitir lucir los modelitos. Su imagen es un buen ejemplo de como 5 elementos pueden funcionar para crear un look imperecedero: siempre de negro, melena ultralisa (preferiblemente a la cara), cejas espesas, bronceado indeleble y ojos fumée. Parece sencillo pero probar a imitarlo y veréis qué espanto.
Pero la vida de una gran editora aunque sea de moda no es de brillo constante, las sombras: su dosis diaria de Lemoxyl para mantener la calma y el vodka "con un copa me siento más bella y mejor". Lo dicho, puro sex, drugs and rock´n´roll.
Editora jefe del Vogue Italia. La menos mediática del grupo. Es autora de libros sobre fotografía, moda, arte y diseño. Su hermana Carla Sozzani es la propietaria de una de las tiendas más influyentes de Milán, 10 Corso Como.
Promotora de concursos de diseño, vive la moda desde la teoría y la práctica descubriendo el recambio generacional.
Su boticceliana melena rubia es sin duda la seña de identidad de la italiana; ya que vistiendo se muestra más ecléctica que el resto de sus compañeras. Sobre su estilo, nos quedamos mudas, no nos inspira ni para bien, ni para mal. Soso ¿quizás?
Anne Wintour: "la diabla"
57 años. Inglesa. Divorciada de David Shaffer por su relación con un inversor millonario que es el único que le hace al menos sonreir.
La todopoderosa directora del Vogue América empezó trabajando en la mítica boutique Biba a los 15 años. Es a la que mejor intuimos el perfil debido a la famosa peli "El diablo viste de Prada".
Parece que la literatura ha ayudado a acrecentar la aureola de maldita y que ella está encantada con esa sobre-exposición a la fama. De rigurosa disciplina, por algo ha llegado a donde ha llegado, se levanta a las 6:00, nunca pasa más de 20 minutos en una fiesta, y se acuesta a las 22:15.
Bajo su eterna melenita de aspirante al baile de fin de curso, pose tímida de brazos cruzados, mirada a través de los cristales o vestiditos de niña bien americana... afirman los que la conocen que se esconde una loba con piel de cordero, o mejor dicho de visón porque le encanta lucir fur, y mira por donde, ya por eso, no nos gusta. Además la imagen que proyecta del american way of life tan perfecta seguro que esconde truco. Nos gustaría verla desmelenada y bailando descalza tras un desfile, eso sí, si no le importa ese día acostarse tarde.
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