Estilo sirena y grandes escotes en la XXII Gala de los premios Goya:
La más fotografiada y posada ha sido Elsa Pataky, con un bonito vestido color maquillaje de Versace, con amplio escote por detrás y por delante, e incrustaciones de brillantitos. Lástima que el peinado con ese flequillo escobilla y el moño alto no acompañe el conjunto.
Maribel Verdú, cual diosa griega, con un vestido drapeado color gris metalizado y hiedra brocada recorriendo el cuerpo formando un asimétrico tirante, recogió al fin su merecido Goya. Magníficos pendientes y un sencillo peinado. Favorecedor.
Belén Rueda, fiel a Carolina Herrera, con un palabra de honor, estilo sirena de hollywood. Melena ondulada muy gilda.
De Natalia Verbeke, mejor hablamos otro día... o no.
Nawja Nimri de Dior con un gran escote, cuerpo drapeado y pronunciadas hombreras. Fiel a su propio estilo, siempre con algún toque sorprendente para salirse del típico estilismo alfombra.
Mónica Cruz de Dolce & Gabbana, el negro palabra de honor con gran cinturón lazo, no era su mejor estilismo. Cuando se recarga a lo diva italiana pierde encanto.
Blanca Portillo avanzando lo que será la colección de David Delfin la próxima semana en Cibeles. Siempre nos han gustado las rayas del diseñador y cuando las viste para los Goya nos divierte.
Goya Toledo con un supervestido de Elie Saab con cuatro cascadas de volantes y profusión de pedrería del diseñador favorito de la desesperada Terry Hatcher. Para la más modelo de las actrices españolas, el vestido está a su altura y estilo.
Silvia Abascal empeñada como siempre de aparentar ser una señora mayor, lo consiguió con un Cavalli sobrio que quizás hubiera ganado con un peinado que no la avejentara tanto.
Verónica Sánchez a lo Dita Von Teese, mal aconsejada y peinada, no acertó ni en el collar.
Emma Suárez, con un clásico túnica griega en seda negro, acertó porque no innovó, ya que cuando se arriesga no debería salir de casa. No ha sido el caso; aunque podría haber estado más estilosa, quizás si se dejara aconsejar...
Se han esmerado y se nota, ahora toca el siguiente paso de arriesgar un poquito más. Echamos de menos a la siempre sorprendente Candela Peña y sus desenfadados estilismos que siempre dan la nota libre y descomplicada a la gala. No hemos echado de menos a Bebe, que ha vuelto a su antimoda cuando no la patrocina Loewe.
El próximo año más. Buen lunes!
Maribel Verdú, cual diosa griega, con un vestido drapeado color gris metalizado y hiedra brocada recorriendo el cuerpo formando un asimétrico tirante, recogió al fin su merecido Goya. Magníficos pendientes y un sencillo peinado. Favorecedor.
Belén Rueda, fiel a Carolina Herrera, con un palabra de honor, estilo sirena de hollywood. Melena ondulada muy gilda.
De Natalia Verbeke, mejor hablamos otro día... o no.
Nawja Nimri de Dior con un gran escote, cuerpo drapeado y pronunciadas hombreras. Fiel a su propio estilo, siempre con algún toque sorprendente para salirse del típico estilismo alfombra.
Mónica Cruz de Dolce & Gabbana, el negro palabra de honor con gran cinturón lazo, no era su mejor estilismo. Cuando se recarga a lo diva italiana pierde encanto.
Blanca Portillo avanzando lo que será la colección de David Delfin la próxima semana en Cibeles. Siempre nos han gustado las rayas del diseñador y cuando las viste para los Goya nos divierte.
Goya Toledo con un supervestido de Elie Saab con cuatro cascadas de volantes y profusión de pedrería del diseñador favorito de la desesperada Terry Hatcher. Para la más modelo de las actrices españolas, el vestido está a su altura y estilo.
Silvia Abascal empeñada como siempre de aparentar ser una señora mayor, lo consiguió con un Cavalli sobrio que quizás hubiera ganado con un peinado que no la avejentara tanto.
Verónica Sánchez a lo Dita Von Teese, mal aconsejada y peinada, no acertó ni en el collar.
Emma Suárez, con un clásico túnica griega en seda negro, acertó porque no innovó, ya que cuando se arriesga no debería salir de casa. No ha sido el caso; aunque podría haber estado más estilosa, quizás si se dejara aconsejar...
Se han esmerado y se nota, ahora toca el siguiente paso de arriesgar un poquito más. Echamos de menos a la siempre sorprendente Candela Peña y sus desenfadados estilismos que siempre dan la nota libre y descomplicada a la gala. No hemos echado de menos a Bebe, que ha vuelto a su antimoda cuando no la patrocina Loewe.
El próximo año más. Buen lunes!
fotos: el país/el mundo/público
9 comentarios:
Me quedo con Goya Toledo sin duda. Tambien me gusta el vestido de Silvia Abascal(que es verdad que le falla el pelo) y el de Belen Rueda.
Yo también me quedo con Goya, la mejor. Y desde luego alguien debería asesorar a Elsa con su peinado, ¡qué espanto!
Besos!
gracias por la galería de fotos, me perdí la gala... (y gracias también por poner una foto mía en este espacio tan agradable).
Un saludo
Maribel y siempre Maribel, estaba radiante, absolutamente bella y perfecta con ese recogido, esos pendientes, y por supuesto ese vestido. Monica Cruz y la Verbeke, lo peor de la gala. beso!
Para mi lo peor la presidenta, la Verbeke y Neus Asensi (que he leido por ahí que iba de Versace...), Y tienes razón en lo del pelo de Silvia Abascal, si fuese mejor peinada sería imbatible.
besos
genial el post...estoy totalmente de acuerdo contigo...
De todas formas, a Elsa, yo la veo moniiisima con el moñito...aunque bueno, que es lo que le queda mal a esta mujer?.
La verdad que si que se echan de menos los estilismos de candela peña...le daban el toque desenfadado a la alfombra!.
Besitos.
Hola a todas,
Bego, Chicochuc, Goya juega con ventaja con ese gusto que tiene y el vestido sin duda precioso. Maribel también me ecanta Scrunchie, madura y la veo serena y maravillosa. Di, ejem la presidenta, antes de entrar en la gala ptse, pero inexplicable el marabú ese a la garganta con el que salió, además qeu la combinación rojo y negro no me gusta nada. El año pasado de Delfin estaba más graciosa. Y Verbeke ay solo puedo decir. Namy, es guapa pero la voy viendo inexpresiva en esa carrera por la perfección, con un rictus como estirado, no sé si son imaginaciones mías.
Elena, te dejo para el final porque soy yo la que te doy las gracias por diseñar esos complementos tan chulos, como el collar cuya foto he añadido en el apdo "no sin mis accesorios"
Besos para todas y mil gracias por pasaros
Me gustaron Silvia Abascal (excepto su peinado de octogenaria) Goya Toledo y Maribel Verdú
Bastante bien Nawja Nimri (que fue con el pelo de levantarse de la siesta) y Belén Rueda (ojalá cambie de tinte)
Me horripilaron: Neus Asensi, por su pinta de choni regordeta; Elsa Pataki por su vestido que le quedaba grande en las mangas, su barroquismo, su moño horrible, sus rostro escalofriantemente operado y sus aires de diva insoportable; Letizia Sabater, tan hortera como siempre en plan Anita Obregón; la chica vestida de cebra; Natalia Verbeke que no podía respirar; Emma Suárez rancia a más no poder; González Sinde con esa boa que no sabía llevar y un vestido que le marcaba la tripa; la de los Serrano, disfrazada de pin-up o yo que sé.
Y ellos, pa orinar y no echar gota, sin afeitar, ni peinar, vestidos de andar por casa o ir a por el pan, de dolor
Me alegré por el goya a Maribel Verdú pero Corbacho ya me cansa y los goya siguen siendo un rollo y sin glamour por ningún lado
Solo pido para el año que viene un mínimo a todos y todas: ¡¡que se peinen!!
me gustron monica cruz y goya toledo. belen rueda estaba radiante pero elsa pataky horrorosa, el vestido era feo y no le sentaba del todo bien
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